Los fabricantes de automóviles continúan desarrollando formas de garantizar que tanto los conductores de automóviles como los pasajeros permanezcan seguros en caso de accidente. Una de las últimas innovaciones en tecnología de vehículos es la creación de un automóvil sin conductor. Con una computadora que maneja la rueda, la posibilidad de que un error humano contribuya a una caída se ve muy disminuida. Pero los accidentes aún ocurren.
El juego de la culpa en accidentes automovilísticos de vehículos autónomos
Entonces, ¿quién es responsable durante un accidente donde el conductor es el automóvil mismo?
Varios fabricantes de automóviles, como Volvo, indican que están dispuestos a aceptar responsabilidad si uno de sus vehículos tiene la culpa. Sin embargo, no es necesariamente tan fácil determinar dónde radica la falla. Un automóvil sin conductor consiste en numerosos sistemas computarizados desarrollados por diferentes programadores producidos por varias compañías. Identificar el sistema que causó o contribuyó al choque puede ser difícil y tomar mucho tiempo.
Además, los gobiernos aún no han desarrollado políticas que regulen la industria automotriz sin conductor para ayudar a garantizar que los consumidores entiendan que tendrán un recurso legal y financiero. Dado que los humanos causan más del 94% de los accidentes automovilísticos cada año, no es sorprendente que los principales reguladores hayan indicado que están decididos a buscar “tecnologías que salven vidas” y herramientas para aumentar la seguridad vial.
Aunque el automóvil sin conductor puede parecer algo del futuro, los accidentes automovilísticos son, desafortunadamente, cosa del presente. Si ha estado involucrado en un accidente automovilístico, ya sea como conductor, pasajero, peatón o ciclista, contáctenos. Solo un bufete de abogados acreditado y con experiencia especializado en choques vehiculares puede ayudarlo a navegar su reclamo y obtener la compensación que merece. Nuestros abogados en Plantation y en otras ciudades de la Florida están para asistirlo. Llame al (800) 854-5481.
